Los R.A.E.E. en el mundo.

 

Los R.A.E.E. y sus problemas.

Los RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos) son objetos que son de uso cotidiano, como tablets, lavadoras, celulares, heladeras o computadoras, que cuando se acaba su uso se vuelven inútiles e inservibles, a estos se los considera RAEE. Estos traen una infinidad de problemas si no son bien tratados a la hora de desecharlos.

En mi opinión el mayor problema que provocan los RAEE son la cantidad de sustancias y químicos tóxicos que dañan el medioambiente si no son bien gestionados, como el cadmio, mercurio, plomo, arsénico, fósforo, aceites peligrosos y gases que debilitan la capa de ozono o que aumentan al calentamiento global como los hidrocarburos (HC), hidroclorofluorocarbonos (HCFC), hidrofluorocarbonos (HFC), clorofluorocarbonos (CFC) o amoniaco (NH3).Para intentar solucionar este problema en Uruguay se crearon leyes como en el caso de la Ley N° 19829 en la cual dan una serie de reglas que se tienen que cumplir. Además, en varios municipios y localidades, se han establecido puntos de recolección específicos para los RAEE. Estos lugares suelen ser centros de reciclaje o puntos de entrega gestionados por organizaciones o empresas especializadas en el reciclaje de estos dispositivos, esto sirve para el caso de tener RAEE y no saber qué hacer con ellos.

Estos residuos normalmente si son bien gestionados terminan en:

Reparación o Reutilización: Si los dispositivos aún están en condiciones de funcionamiento o pueden ser reparados, pueden ser sometidos a procesos de reutilización o reparación. En este caso, los aparatos pueden ser revendidos, donados o usados para arreglar otros aparatos similares, alargando su vida útil.

Recuperación de Materiales: Los dispositivos reciclados pueden ser desmantelados y sometidos a procesos de recuperación de materiales. En estos procesos, se obtienen y se recuperan materiales valiosos, como metales preciosos, plásticos, vidrios y otros componentes reutilizables.

Eliminación adecuada: Si los dispositivos no son adecuados para la reutilización, reparación o reciclaje, pueden ser trasladados a instalaciones de disposición final adecuada, como plantas de incineración controlada o vertederos autorizados. Es importante que estos lugares cumplan con las regulaciones ambientales para garantizar una eliminación segura y responsable.

Las magnitudes de los RAEE por el mundo:

Hace un tiempo se hizo un ranking de los RAEE producidos en 2019 globalmente, en este se muestra que el país que encabeza la lista es China que produjo 10,129 toneladas métricas per cápita, este número es una locura comparado con los que le siguen, ya que el siguiente es EE. UU. el cual hizo 6,918 toneladas métricas. Estos números siguen siendo una cantidad exorbitante como podemos ver al notar que el tercer puesto se lo lleva India con 3,230 toneladas métricas (esto es un tercio de China). 

En numerosos países alrededor del mundo, se encuentran regulaciones estrictas para la producción, venta, manejo y reciclaje de dispositivos eléctricos y electrónicos, incluyendo lámparas y luminarias. Tanto Europa, América del Norte, América del Sur, Asia y África han implementado legislaciones con el objetivo de asegurar un tratamiento adecuado de los RAEE.

También están las Naciones Unidas con los ODS que son los “Objetivos de Desarrollo Sostenible”, estos son 17 objetivos que buscan solucionar los problemas mundiales, algunos ejemplos serían como el objetivo 2 “Hambre cero” o el 16 “Paz, justicia e instituciones sólidas”.

Los ODS y los RAEE:

La mayoría de los ODS están conectados con los R.A.E.E. como en el caso del número “3” que trata sobre la salud y bienestar humano lo cual es afectado por los tóxicos químicos de los residuos eléctricos y electrónicos. También en el ODS 11 “Ciudades y comunidades sostenibles” que para mejorar la gestión urbana para construir lugares más seguros y sostenibles se plantea que debemos deshacernos adecuadamente de nuestros R.A.E.E. depositándolos y separándolos en su contenedor adecuado.